Las invitadas deben ser muy selectivas a la hora de elegir el vestido, ya que al estar en la lista de la pareja para asistir a su fiesta ocupan un lugar especial dentro de la celebración. Lucir a la altura de la novia no significa restarle importancia.
Aunque el gusto propio, la complexión y la edad así como la hora y el tipo de boda son los principales parámetros para elegir el vestido, las mujeres fashionistas siempre están al tanto de la moda.
Los largos, sofisticados y con pedrería son adecuados para lugares cerrados y personalidades sofisticadas, aunque las líneas sencillas y los monocromáticos también son ideales, al igual que en un jardín o área exterior, pero en estos últimos casos la textura se recomienda que sea de fibras naturales. En los colores no hay límites.
Para el día los trajes formales y vestidos cortos en tonos suaves.
Sin embargo, Pantone ha atrapado la mirada con el magenta y también desfila como el preferido de este año.
De acuerdo a Pronovias en el 2019 hay que deslumbrar desde el momento que se pisa la iglesia. Además, los diseñadores coinciden que lo natural sigue marcando la pauta.
Top:
- Escotes y espaldas sexys con vestidos tipo halter, pronunciados escotes en pico, espaldas abiertas.
- Para el día vestidos cortos y trajes de dos piezas en elegantes telas y detalles que hacen la diferencia.